Solo una pequeña reflexión sobre el 2 de Octubre

Como todos sabemos el día 2 de Octubre de 1968 es un día negro, trágico en la historia nacional. Ese día, el gobierno encabezado por el PRIista Gustavo Díaz Ordaz uso al ejército, a la policía y a los medios de comunicación para cometer asesinatos, torturas, violaciones a los derechos humanos. No Olvidamos, no perdonamos....pero ¿han notado que todo sigue igual?

Miles de muertos, desaparecidos, torturas, violaciones, etc. Los medios de comunicación actúan actuales con más descaro que los de 1968, ya no tenemos a Zabludovsky en la televisión, pero tenemos a los lame-culos oficiales: López Doriga, Alatorre, al estúpido de Villalvazo o al imbécil de Loret de Mola, eso sin contar a la mártir de los huevos. ¿En que ha cambiado México? ¿en los protagonistas de una novela-que desgraciadamente- se repite una y otra vez con más crueldad en cada "gobierno"?

Nadie sabe a ciencia cierta cuantos hombres y mujeres libres fueron asesinados en 1968, pero tampoco nadie sabe ahora cuantas miles de personas han sido enterradas en las fosas comunes a causa de la "guerra" del dipsómano de Calderón. Nadie sabe cuantos indígenas mueren de hambre o frío por la irresponsabilidad de los gobiernos locales, nadie sabe cuantos inmigrantes mueren dentro de nuestras fronteras, cuantos niños y niñas son usados en redes de prostitución, cuantas personas en condición de calle han muerto a lo largo de tantos años.

¿A que voy? Recordar no es malo, tenemos que hacerlo. El problema radica en vivir y re-vivir una y otra vez esos errores. Hoy conmemoramos un años más de esa matanza, pero cuando salgamos a las calles conmemoremos, recordemos y alcemos la voz por cada hombre, anciano, mujer y niño que ha sido asesinado no solo por Díaz Ordaz, sino por todos los que le siguieron. Por cada cifra sin nombre pronunciada como daño colateral por el espurio de los Pinos sin ningún respeto, por las mujeres violadas de Atenco, por los indígenas asesinados en Acteal, por las comunidades autónomas, por los muertos a causa del modelo ne-liberal.

¡No olvidemos, pero tampoco repitamos! hay que cerrar el círculo, darle la vuelta a la página de este libro de muertes nacionales. Si no lo hacemos hoy, en 50 años marcharán nuestros nietos en nuestra memoria. Algo estamos haciendo mal...